CYBER MONDAY 💥PLANAZO COMPLETO POR 99€ 💥 ¡LO QUIERO!

¿Qué sabemos sobre las hormonas femeninas?

Hormonas femeninas y menopausia

En el complejo campo de la biología femenina, las hormonas desempeñan un papel crucial. Desde la pubertad hasta la menopausia, estas poderosas bioquímicas gobiernan una amplia gama de procesos en el cuerpo de la mujer, desde el ciclo menstrual hasta el estado de ánimo y la salud ósea.

Sin embargo, a pesar de su importancia, las hormonas femeninas siguen siendo un tema en gran parte desconocido para muchas personas. ¿Qué sabemos realmente sobre estas sustancias químicas vitales y su impacto en la salud y el bienestar de las mujeres?

En este artículo, nos adentraremos en el mundo de las hormonas femeninas. Exploraremos desde su función básica hasta su influencia en la menopausia.

¿Cuáles son las principales hormonas femeninas?

Las principales hormonas femeninas incluyen estrógeno, progesterona y testosterona en diferentes cantidades y en diferentes momentos de la vida de una mujer.

1. El estrógeno, conocido como la hormona principal de la feminidad, desempeña un papel fundamental en el desarrollo sexual, la regulación del ciclo menstrual y la salud ósea.

2. Por otro lado, la progesterona, producida principalmente durante la segunda mitad del ciclo menstrual y durante el embarazo, prepara el útero para la implantación del óvulo fertilizado y ayuda a regular el ciclo menstrual.

3. Aunque comúnmente asociada con los hombres, la testosterona también se encuentra en el cuerpo de la mujer y juega un papel en la libido, la masa muscular y la salud ósea.

Estas hormonas interactúan de manera compleja y coordinada para mantener el equilibrio hormonal necesario para la salud y el bienestar femeninos.

¿Cuáles son los síntomas más comunes de la menopausia relacionados con los cambios hormonales?

Durante la menopausia, cuando los niveles de estrógeno y progesterona disminuyen significativamente, muchas mujeres experimentan una serie de síntomas que pueden afectar su calidad de vida.

Los síntomas más comunes incluyen sofocos, sudores nocturnos, cambios en el patrón del sueño, sequedad vaginal y cambios en el estado de ánimo, como la irritabilidad y la depresión. Además, la disminución de los niveles de estrógeno también puede aumentar el riesgo de problemas de salud a largo plazo, como la osteoporosis y enfermedades cardiovasculares. Es importante reconocer estos síntomas y buscar formas de gestionarlos para garantizar una transición más suave a esta nueva fase de la vida.

¿Cuál es la relación entre las hormonas y la libido durante la menopausia?

La disminución de los niveles de estrógeno y testosterona puede afectar la lubricación vaginal, la sensibilidad sexual y la respuesta física al estímulo sexual, lo que puede disminuir el interés en el sexo. Además, los síntomas como los sofocos, la fatiga y los cambios en el estado de ánimo pueden afectar el deseo sexual y la intimidad en general.

Sin embargo, es importante recordar que la libido es multifacética y puede ser influenciada por una variedad de factores, incluidos los aspectos emocionales, psicológicos y relacionales. Aunque los cambios hormonales pueden afectar la libido durante la menopausia, existen tratamientos naturales disponibles como DESEO para abordar estos problemas y mantener una vida sexual satisfactoria y saludable.

Preguntas frecuentes sobre hormonas y menopausia

Alimentos ricos en omega-3 (salmón, semillas de chía, nueces), calcio (lácteos bajos en grasa, verduras de hoja verde, tofu), antioxidantes (frutas y verduras coloridas) y proteínas magras (carnes magras, pollo, pescado, legumbres).

  • Sí, el descenso de hormonas femeninas, como el estrógeno y la progesterona durante la menopausia, puede afectar al estado de ánimo. Esto puede manifestarse en síntomas como cambios de humor, irritabilidad, ansiedad o depresión.

    Te recomendamos tomar EQUILIBRIO para regular los desajustes en el estado de ánimo y sentirte ¡A tope y sin sofocos!
Author picture

El artículo ha sido escrito y revisado por la biotecnóloga Júlia Guri.

Más sobre la autora
Otros posts que pueden interesarte
Los más vendidos
Móntate tu plan personalizado

¿No sabes por dónde empezar?
Descubre que Plan necesitas para afrontar la menopausia con plenitud

Personaliza tu plan
Realiza el test y nuestras expertas te diseñan un plan
único para tu menopausia

Accede

Contáctanos

Queremos ayudarte, acompañarte en esta transición
Déjanos tus datos y te llamaremos lo antes posible.
Horario de atención de lunes a viernes, de 9h a 18h
Aceite de geranio
Reconfortante

El aceite de geranio ha demostrado tener un impacto sobre el estado de ánimo, en concreto sus propiedades para mejorar el humor. Su agradable olor y sus propiedades aromáticas se utilizan a menudo en aromaterapia. La aromaterapia con aceite de geranio ha sido reconocida por su potencial para aliviar los síntomas de ansiedad y depresión, contribuyendo a mejorar el estado de ánimo y a reducir los cambios de humor (1).

Aceite de lavanda
Calmante

La mayoría de estudios sobre el aceite de lavanda se centran en sus propiedades terapéuticas generales, como la relajación, el alivio de la ansiedad y sus efectos sedantes. Este aceite es conocido por sus efectos calmantes sobre el sistema nervioso, que pueden ayudar indirectamente con síntomas como los sofocos asociados al estrés o a los cambios hormonales durante la menopausia (1).

Aceite de
ylang-ylang
Calmante

El aceite de Ylang-ylang, extraído de las flores del árbol Cananga odorata, proporciona múltiples beneficios en diversas aplicaciones. Este aceite es especialmente valorado por su capacidad para reducir la presión arterial y fomentar la relajación cuando se absorbe a través de la piel. Asimismo, posee propiedades antibacterianas significativas (1).

1. Kurniawansyah, I., Ratnawulan, S., & Budiman, A. (2018). THE ANTIBACTERIAL ACTIVITIES OF AROMATHERAPY ESSENTIAL OILS OF LAVENDER (LAVANDULA ANGUSTIFOLIA MILL), ROSEMARY (ROSMARINUS OFFICINALIS L.) AND YLANG-YLANG (CANANGA ODORATA (LAMK.) HOOK) AGAINST AIRBORNE BACTERIA. International Research Journal Of Pharmacy. https://doi.org/10.7897/2230-8407.09692.

Reishi
Neuroregenerativo

El Reishi es un hongo medicinal que fomenta la proliferación de células progenitoras neurales (CPN) para mejorar la neurogénesis y aliviar el déficit cognitivo.

Es utilizado como agente terapéutico regenerativo para el tratamiento del deterioro cognitivo asociado a enfermedades neurodegenerativas (1).

Amapola Californiana
Sedante

La amapola californiana se emplea en el tratamiento de trastornos del sueño y ansiedad. Estudios han demostrado que la combinación de la amapola californiana con la valeriana contribuye de manera significativa a mejorar el insomnio. Este tratamiento favorece el aumento de la duración del sueño nocturno, reduce el número de despertares y alivia la ansiedad (1).

Pasiflora
Ansiolítica

Estudios sugieren que ayuda a reducir el estrés, y por lo tanto, puede ser útil en el tratamiento del insomnio, la ansiedad y la depresión. Su actuación incluye la inhibición de forma dosis dependiente de la unión de los antagonistas específicos a sus receptores GABAA y GABAB, además de inhibir la recaptación de GABA. (1)

Salvia
Termorregulador

Además del efecto estrogénico, la salvia da lugar a la modulación de distintos neurorreceptores y de los transportadores de serotonina – 5HT como modo de acción del extracto alcohólico de Salvia. officinalis. Esto en conjunto con su actuación sobre centro el termorregulador hipotalámico, resulta en un control de los síntomas  vasomotores (sofocos y sudores).

Maca
Energizante

El tratamiento de 6 semanas con maca en mujeres postmenopáusicas, ha mostrado una reducción significativa del 30,8% en la ansiedad con respecto al placebo, además de reducir la disfunción sexual en mujeres independientemente de su actividad estrogénica (1).

Estudios in vitro revelan un efecto anti-fatiga y potenciador de la capacidad muscular gracias a su capacidad de aliviar el estrés muscular post-ejercicio, mejorando el rendimiento físico y retrasando la fatiga muscular (2).

Las raíces de maca son una fuente de alta densidad nutricional, incluyendo carbohidratos, proteínas y fibra, además de minerales, vitaminas y aminoácidos. La maca destaca por mejorar la salud reproductiva y la libido. Su contribución nutricional la convierte en una fuente esencial de energía, especialmente beneficiosa para mujeres en la menopausia (3).

Tribulus
Lubricante

Estudios muestran que la suplementación con tribulus en mujeres menopáusicas mejora en un 83.3% la lubricación vaginal antes y durante las relaciones, luego de un periodo de consumo de 90 días (1).

Rhodiola
Anti-fatiga

Dentro de sus compuestos bioactivos, están las rosavinas y salidrosides, que ejercen un efecto positivo sobre el eje hipotalámico-pituitario-adrenal, reduciendo los niveles de cortisol a nivel del sistema nervioso. Por otro lado, estudios en mujeres menopáusicas muestran que sus activos tienen actividad selectiva por los receptores de estrógenos (ER-α), y actividad sobre la enzima óxido nítrico sintetasa, teniendo un efecto vasodilatador y antiinflamatorio (1).

Fenogreco
Modulador hormonal

Estudios revelan que la suplementación durante 90 días en mujeres con síntomas de postmenopausia, muestra una mejora significativa en la sequedad vaginal, reduciendo en un 50% las molestias asociadas. 

Además de reducir en un 47,8% los sofocos diarios, pasando desde 3 a 4 episodios diarios, a sólo 1 a 2 episodios (1).

Shatavari
Modulador hormomal

Sus compuestos activos, entre ellos, las saponinas, tienen una estructura similar a la del estrógeno humano, lo cual ha mostrado en estudios in vitro una alta capacidad para unirse a receptores de estrógenos (ER-α) en el cuerpo, imitando un efecto estrogénico generalizado de mediana intensidad, e incluso teniendo una acción anticarcinogénica ante casos de cáncer de mama (1).

En postmenopausia, su suplementación muestra mejoras en la función y potencia muscular, ayudando a preservar la masa muscular y previniendo estados de osteoporosis (2).

Ashwagandha
Anti-estrés
Estudios revelan que la suplementación durante 8 semanas en mujeres con síntomas de menopausia, mostró una reducción significativa de los síntomas clásicos, con especial mejora en el dominio psicológico como la ansiedad, estrés, irritabilidad y cambios de humor (1).

Sus compuestos activos actúan principalmente en el sistema nervioso central en donde simulan neurotransmisores inhibitorios (tipo GABA) que reducen los estímulos nerviosos; normalizan los niveles de dopamina y mejoran la función motora; intensifica la actividad de la acetilcolina y mejora la neurotransmisión sináptica. También a nivel de sistema inmune, estimula los linfocitos, células encargadas de conferir protección frente agentes patógenos externos (2).

Es por esto, que la ashwagandha se utiliza comúnmente como un adaptógeno, lo que significa que puede ayudar a equilibrar y regular el sistema nervioso central, reducir el estrés y mejorar la respuesta del cuerpo a la tensión física y emocional.