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Tengo dolor de senos sin tener la regla. ¿Qué hago?

El dolor de senos, también conocido como mastalgia, es una preocupación común para muchas mujeres, especialmente cuando ocurre fuera del ciclo menstrual. Este síntoma puede ser particularmente relevante durante la premenopausia, una etapa en la vida de una mujer que trae consigo una serie de cambios hormonales y físicos. En este artículo, exploraremos por qué puedes estar experimentando dolor de senos sin tener la regla, especialmente en el contexto del cese de la menstruación y el inicio de la premenopausia, y te ofreceremos consejos sobre qué hacer al respecto.

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EQUILIBRIO

El dolor de senos durante la premenopausia es común debido a los cambios hormonales. DOMMA ofrece Equilibrio, un suplemento diseñado para aliviar los síntomas de la menopausia, incluyendo el malestar en los senos. Con ingredientes como Shatavari, Rhodiola y Ashwagandha, Equilibrio ayuda a mantener el balance hormonal, reduce el estrés y mejora el bienestar general. A diferencia de soluciones temporales, Equilibrio proporciona un apoyo integral para esta etapa.

¿Lista para sentirte mejor? Descubre cómo Equilibrio puede ayudarte a manejar los síntomas de la premenopausia, incluyendo el dolor de senos.

¿Es normal tener dolor de senos durante la pre-menopausia?

Sí, es completamente normal experimentar dolor de senos durante la premenopausia. Esta etapa, que precede a la menopausia, se caracteriza por fluctuaciones hormonales significativas que pueden afectar varias partes del cuerpo, incluidos los senos.

¿Por qué duelen los senos en la pre-menopausia?

El dolor de senos en la premenopausia puede atribuirse a varios factores:

Fluctuaciones hormonales: Durante la premenopausia, los niveles de estrógeno y progesterona pueden variar considerablemente. Estos cambios hormonales pueden causar sensibilidad y dolor en los senos.

Ciclo menstrual irregular: A medida que te acercas a la menopausia, es posible que tus ciclos menstruales se vuelvan irregulares. Incluso si no tienes la regla, los cambios hormonales asociados pueden provocar dolor de senos.

Retención de líquidos: Los cambios hormonales también pueden causar retención de líquidos, lo que puede llevar a una sensación de hinchazón y dolor en los senos.

Tejido mamario denso: La densidad del tejido mamario puede aumentar debido a los cambios hormonales, lo que puede hacer que los senos sean más sensibles al dolor.

¿Qué puedo hacer para aliviar el dolor de senos?

Si experimentas dolor de senos durante la premenopausia, hay varias medidas que puedes tomar para aliviar el malestar:

  1. Ropa interior adecuada: Usa un sostén de soporte adecuado que no apriete demasiado pero que ofrezca buen soporte.
  2. Compresas frías o calientes: Aplicar compresas frías o calientes puede ayudar a reducir la inflamación y el dolor.
  3. Suplementación: Equilibrio, puede ayudarte con la desregulación hormonal, es el perfecto aliado para mejorar los síntomas en esta etapa.
  4. Dieta balanceada: Mantener una dieta baja en cafeína y sal puede ayudar a reducir la retención de líquidos y la sensibilidad en los senos.
  5. Ejercicio regular: Mantener una rutina de ejercicios puede mejorar la circulación y reducir el dolor.

¿Cuándo consultar a un médico?


Aunque el dolor de senos durante la premenopausia suele ser normal, es importante estar atenta a ciertos signos que podrían requerir atención médica:

  • El dolor es persistente y no mejora con el tiempo.
  • Notas bultos, secreciones o cambios en la piel del seno.
  • El dolor interfiere significativamente con tus actividades diarias.
  • Tienes antecedentes familiares de cáncer de mama.

Si experimentas alguno de estos síntomas, es fundamental buscar la opinión de un profesional de la salud.

Conclusión:

El dolor de senos sin tener la regla puede ser desconcertante, especialmente durante la premenopausia. Sin embargo, es una experiencia común y generalmente no es motivo de preocupación. Identificar las posibles razones y aplicar algunas medidas de alivio puede hacer una gran diferencia en tu comodidad diaria. No obstante, siempre es recomendable estar atenta a los cambios en tu cuerpo y consultar a un médico si tienes alguna preocupación.

Preguntas frecuentes:

Para reducir el dolor de senos, evita los siguientes alimentos:

  1. Cafeína.
  2. Alcohol.
  3. Alimentos altos en grasas saturadas.
  4. Alimentos salados.
  5. Azúcar refinada.
  6. Productos animales tratados con hormonas de crecimiento.

En su lugar, opta por una dieta rica en frutas, verduras, granos enteros, proteínas magras y grasas saludables, y asegúrate de mantener una hidratación adecuada. Si el dolor persiste, consulta a un médico.

Sí, el ejercicio puede causar dolor en los senos en algunas mujeres debido al impacto, la fricción y los cambios hormonales. Para minimizarlo, es importante usar un sostén deportivo adecuado, ropa deportiva cómoda y considerar actividades de bajo impacto. Mantenerse hidratado también puede ayudar. Si el dolor es persistente o severo, es recomendable consultar a un médico.

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El artículo ha sido escrito y revisado por la biotecnóloga Júlia Guri.

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Aceite de geranio
Reconfortante

El aceite de geranio ha demostrado tener un impacto sobre el estado de ánimo, en concreto sus propiedades para mejorar el humor. Su agradable olor y sus propiedades aromáticas se utilizan a menudo en aromaterapia. La aromaterapia con aceite de geranio ha sido reconocida por su potencial para aliviar los síntomas de ansiedad y depresión, contribuyendo a mejorar el estado de ánimo y a reducir los cambios de humor (1).

Aceite de lavanda
Calmante

La mayoría de estudios sobre el aceite de lavanda se centran en sus propiedades terapéuticas generales, como la relajación, el alivio de la ansiedad y sus efectos sedantes. Este aceite es conocido por sus efectos calmantes sobre el sistema nervioso, que pueden ayudar indirectamente con síntomas como los sofocos asociados al estrés o a los cambios hormonales durante la menopausia (1).

Aceite de
ylang-ylang
Calmante

El aceite de Ylang-ylang, extraído de las flores del árbol Cananga odorata, proporciona múltiples beneficios en diversas aplicaciones. Este aceite es especialmente valorado por su capacidad para reducir la presión arterial y fomentar la relajación cuando se absorbe a través de la piel. Asimismo, posee propiedades antibacterianas significativas (1).

1. Kurniawansyah, I., Ratnawulan, S., & Budiman, A. (2018). THE ANTIBACTERIAL ACTIVITIES OF AROMATHERAPY ESSENTIAL OILS OF LAVENDER (LAVANDULA ANGUSTIFOLIA MILL), ROSEMARY (ROSMARINUS OFFICINALIS L.) AND YLANG-YLANG (CANANGA ODORATA (LAMK.) HOOK) AGAINST AIRBORNE BACTERIA. International Research Journal Of Pharmacy. https://doi.org/10.7897/2230-8407.09692.

Reishi
Neuroregenerativo

El Reishi es un hongo medicinal que fomenta la proliferación de células progenitoras neurales (CPN) para mejorar la neurogénesis y aliviar el déficit cognitivo.

Es utilizado como agente terapéutico regenerativo para el tratamiento del deterioro cognitivo asociado a enfermedades neurodegenerativas (1).

Amapola Californiana
Sedante

La amapola californiana se emplea en el tratamiento de trastornos del sueño y ansiedad. Estudios han demostrado que la combinación de la amapola californiana con la valeriana contribuye de manera significativa a mejorar el insomnio. Este tratamiento favorece el aumento de la duración del sueño nocturno, reduce el número de despertares y alivia la ansiedad (1).

Pasiflora
Ansiolítica

Estudios sugieren que ayuda a reducir el estrés, y por lo tanto, puede ser útil en el tratamiento del insomnio, la ansiedad y la depresión. Su actuación incluye la inhibición de forma dosis dependiente de la unión de los antagonistas específicos a sus receptores GABAA y GABAB, además de inhibir la recaptación de GABA. (1)

Salvia
Termorregulador

Además del efecto estrogénico, la salvia da lugar a la modulación de distintos neurorreceptores y de los transportadores de serotonina – 5HT como modo de acción del extracto alcohólico de Salvia. officinalis. Esto en conjunto con su actuación sobre centro el termorregulador hipotalámico, resulta en un control de los síntomas  vasomotores (sofocos y sudores).

Maca
Energizante

El tratamiento de 6 semanas con maca en mujeres postmenopáusicas, ha mostrado una reducción significativa del 30,8% en la ansiedad con respecto al placebo, además de reducir la disfunción sexual en mujeres independientemente de su actividad estrogénica (1).

Estudios in vitro revelan un efecto anti-fatiga y potenciador de la capacidad muscular gracias a su capacidad de aliviar el estrés muscular post-ejercicio, mejorando el rendimiento físico y retrasando la fatiga muscular (2).

Las raíces de maca son una fuente de alta densidad nutricional, incluyendo carbohidratos, proteínas y fibra, además de minerales, vitaminas y aminoácidos. La maca destaca por mejorar la salud reproductiva y la libido. Su contribución nutricional la convierte en una fuente esencial de energía, especialmente beneficiosa para mujeres en la menopausia (3).

Tribulus
Lubricante

Estudios muestran que la suplementación con tribulus en mujeres menopáusicas mejora en un 83.3% la lubricación vaginal antes y durante las relaciones, luego de un periodo de consumo de 90 días (1).

Rhodiola
Anti-fatiga

Dentro de sus compuestos bioactivos, están las rosavinas y salidrosides, que ejercen un efecto positivo sobre el eje hipotalámico-pituitario-adrenal, reduciendo los niveles de cortisol a nivel del sistema nervioso. Por otro lado, estudios en mujeres menopáusicas muestran que sus activos tienen actividad selectiva por los receptores de estrógenos (ER-α), y actividad sobre la enzima óxido nítrico sintetasa, teniendo un efecto vasodilatador y antiinflamatorio (1).

Fenogreco
Modulador hormonal

Estudios revelan que la suplementación durante 90 días en mujeres con síntomas de postmenopausia, muestra una mejora significativa en la sequedad vaginal, reduciendo en un 50% las molestias asociadas. 

Además de reducir en un 47,8% los sofocos diarios, pasando desde 3 a 4 episodios diarios, a sólo 1 a 2 episodios (1).

Shatavari
Modulador hormomal

Sus compuestos activos, entre ellos, las saponinas, tienen una estructura similar a la del estrógeno humano, lo cual ha mostrado en estudios in vitro una alta capacidad para unirse a receptores de estrógenos (ER-α) en el cuerpo, imitando un efecto estrogénico generalizado de mediana intensidad, e incluso teniendo una acción anticarcinogénica ante casos de cáncer de mama (1).

En postmenopausia, su suplementación muestra mejoras en la función y potencia muscular, ayudando a preservar la masa muscular y previniendo estados de osteoporosis (2).

Ashwagandha
Anti-estrés
Estudios revelan que la suplementación durante 8 semanas en mujeres con síntomas de menopausia, mostró una reducción significativa de los síntomas clásicos, con especial mejora en el dominio psicológico como la ansiedad, estrés, irritabilidad y cambios de humor (1).

Sus compuestos activos actúan principalmente en el sistema nervioso central en donde simulan neurotransmisores inhibitorios (tipo GABA) que reducen los estímulos nerviosos; normalizan los niveles de dopamina y mejoran la función motora; intensifica la actividad de la acetilcolina y mejora la neurotransmisión sináptica. También a nivel de sistema inmune, estimula los linfocitos, células encargadas de conferir protección frente agentes patógenos externos (2).

Es por esto, que la ashwagandha se utiliza comúnmente como un adaptógeno, lo que significa que puede ayudar a equilibrar y regular el sistema nervioso central, reducir el estrés y mejorar la respuesta del cuerpo a la tensión física y emocional.